La adicción es una enfermedad cerebral primaria y crónica que afecta al circuito de recompensa y que conlleva una serie de manifestaciones físicas, psicológicas y sociales. Esto se refleja en una búsqueda patológica de sustancias o comportamientos que aportan al individuo una sensación de recompensa y/o alivio. Actualmente se proponen dos clases de trastornos adictivos: los relacionados con sustancias y los sin sustancia, también denominados adicciones conductuales. Las principales adicciones conductuales son el juego patológico, la adicción a las Tecnologías de la Información y Comunicación (TICs), compras compulsivas (oniomanía), adicción al sexo y adicción al trabajo.
Las TICs son herramientas diseñadas para informar y comunicar que se han convertido en una parte indispensable de nuestras vidas. En este sentido, el teléfono móvil juega un papel fundamental, ya que proporciona al individuo numerosas herramientas y recursos que, aunque están destinadas a hacer más fáciles las tareas diarias, tienen un cierto potencial adictivo al formar parte del estilo de vida actual. De hecho, el término Nomofobia (no mobile phobia) hace referencia al miedo o la preocupación que una persona puede experimentar al no estar cerca de su teléfono móvil o al ser incapaz de utilizarlo. Además, la adicción al móvil presenta síntomas psíquicos y físicos similares a otros trastornos de dependencia a drogas clásicas.
La adicción al móvil es un trastorno de dependencia sin sustancia, cuya prevalencia está aumentando rápidamente, especialmente entre el sector más joven de la población. Según el informe EDADES 2019, se estima que un 1% de la población padece el síndrome de dependencia al smartphone. Este tipo de trastorno conlleva los mismos problemas sociosanitarios que las adicciones clásicas, con su correspondiente coste económico y social.
El cuestionario VAM QUEST es un cuestionario para la Valoración de la Adicción al Móvil que consta de una serie de preguntas o ítems que están divididas en tres subescalas diferenciadas:
- Patrón de uso del móvil (VAMp) para valorar el riesgo de dependencia al smartphone en base al tiempo de uso de aplicaciones de datos y redes sociales.
- Sintomatología de adicción al móvil (VAMs), con el que se valora la dependencia en base al comportamiento del usuario.
- Consecuencias percibidas de la adicción al móvil (VAMc) para determinar la percepción del riesgo de la persona.
Los aspectos de la adicción que valora el VAM-Quest son los siguientes:
- Craving o búsqueda compulsiva de la conducta de refuerzo, en este caso el uso del móvil.
- Pérdida de control del uso del móvil.
- Consecuencias negativas en la vida cotidiana del uso compulsivo del smartphone.
- Síntomas de abstinencia cuando no se puede utilizar el móvil o los datos no están disponibles.
Se han establecido cuatro categorías que determinan el grado de dependencia o adicción al móvil:
- sin dependencia: en esta categoría se encuentran los usuarios que no utilizan el teléfono móvil, bien porque no están interesados en ello, o porque no pueden utilizarlo. Por tanto, también es posible que usuarios con puntuaciones dentro de esta categoría estén sufriendo aislamiento social a través del móvil.
- grado leve: no indica un riesgo real de padecer una enfermedad y más bien es el resultado de una adaptación a una nueva era tecnológica.
- grado moderado: las personas en este rango no tienen patología, pero sí una conducta de riesgo por hacer un uso desproporcionado del móvil. Por tanto, podrían derivar en adicción ante alguna circunstancia que suponga un estrés o una sobrecarga crónica.
- grado severo: es indicativo de una conducta alterada que difícilmente se puede compaginar con el resto de las actividades de la vida diaria, ya que el móvil se ha convertido en el centro de su vida.
Una vez que un usuario ha realizado el test VAM puede saber si está teniendo una conducta de riesgo, e incluso y ha desarrollado una posible dependencia del móvil
Las TICs son herramientas diseñadas para informar y comunicar que se han convertido en una parte indispensable de nuestras vidas. En este sentido, el teléfono móvil juega un papel fundamental, ya que proporciona al individuo numerosas herramientas y recursos que, aunque están destinadas a hacer más fáciles las tareas diarias, tienen un cierto potencial adictivo al formar parte del estilo de vida actual. De hecho, el término Nomofobia (no mobile phobia) hace referencia al miedo o la preocupación que una persona puede experimentar al no estar cerca de su teléfono móvil o al ser incapaz de utilizarlo. Además, la adicción al móvil presenta síntomas psíquicos y físicos similares a otros trastornos de dependencia a drogas clásicas.
La adicción al móvil es un trastorno de dependencia sin sustancia, cuya prevalencia está aumentando rápidamente, especialmente entre el sector más joven de la población. Según el informe EDADES 2019, se estima que un 1% de la población padece el síndrome de dependencia al smartphone. Este tipo de trastorno conlleva los mismos problemas sociosanitarios que las adicciones clásicas, con su correspondiente coste económico y social.
El cuestionario VAM QUEST es un cuestionario para la Valoración de la Adicción al Móvil que consta de una serie de preguntas o ítems que están divididas en tres subescalas diferenciadas:
- Patrón de uso del móvil (VAMp) para valorar el riesgo de dependencia al smartphone en base al tiempo de uso de aplicaciones de datos y redes sociales.
- Sintomatología de adicción al móvil (VAMs), con el que se valora la dependencia en base al comportamiento del usuario.
- Consecuencias percibidas de la adicción al móvil (VAMc) para determinar la percepción del riesgo de la persona.
Los aspectos de la adicción que valora el VAM-Quest son los siguientes:
- Craving o búsqueda compulsiva de la conducta de refuerzo, en este caso el uso del móvil.
- Pérdida de control del uso del móvil.
- Consecuencias negativas en la vida cotidiana del uso compulsivo del smartphone.
- Síntomas de abstinencia cuando no se puede utilizar el móvil o los datos no están disponibles.
Se han establecido cuatro categorías que determinan el grado de dependencia o adicción al móvil:
- sin dependencia: en esta categoría se encuentran los usuarios que no utilizan el teléfono móvil, bien porque no están interesados en ello, o porque no pueden utilizarlo. Por tanto, también es posible que usuarios con puntuaciones dentro de esta categoría estén sufriendo aislamiento social a través del móvil.
- grado leve: no indica un riesgo real de padecer una enfermedad y más bien es el resultado de una adaptación a una nueva era tecnológica.
- grado moderado: las personas en este rango no tienen patología, pero sí una conducta de riesgo por hacer un uso desproporcionado del móvil. Por tanto, podrían derivar en adicción ante alguna circunstancia que suponga un estrés o una sobrecarga crónica.
- grado severo: es indicativo de una conducta alterada que difícilmente se puede compaginar con el resto de las actividades de la vida diaria, ya que el móvil se ha convertido en el centro de su vida.
Una vez que un usuario ha realizado el test VAM puede saber si está teniendo una conducta de riesgo, e incluso y ha desarrollado una posible dependencia del móvil
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